La directora de Gestión Sostenible del Patrimonio de Fauna Silvestre, Jessica Gálvez -Durand advirtió que el trabajo del Serfor para evitar el comercio de animales silvestres se dificulta nocivamente porque las personas que los adquieren a través del tráfico ilegal no permiten la revisión de las viviendas, generando que estas especies no puedan retornar a su hábitat natural. 

“Las personas que tienen ilegalmente a estos animales no permiten el ingreso a las casas, muchas veces impiden el trabajo, por lo que es difícil recuperar a los animales, en el caso del zorrito Run Run la gente colaboró para su captura, pero en muchos de los casos esconden a los animales”.

En el Informativo por Nacional precisó que la mayoria de animales salvajes extraídos por el tráfico ilegal terminan en el cautiverio porque es muy difícil que retorne a su hábitat silvestre. 

“No solo es que el animal sea silvestre y que sea liberado, hay que estar seguros de qué especie se trata, se tiene que evaluar el área donde se vaya a liberar, además debe estar completamente sano, mostrando una conducta adecuada. En ese sentido, el tráfico ilegal es muy nocivo”.

Gálvez Durand, detalló que el Reglamento de la ley forestal y de fauna silvestre bajo el Decreto Supremo Nº 0192015 establece que aplica una sanción muy grave el capturar, adquirir, colectar, tener, promover la venta y comercializar fauna silvestre sin autorización por lo que las sumas van como mínimo 10 UIT y como máximo 5 mil UIT. 

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