El promotor del Programa Nacional Contra la Violencia Familiar y Sexual del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, César Meléndrez, informó a través de Nacional F.M., que existen 11,700 facilitadores a nivel nacional, que van de puerta en puerta, alertando y apoyando la lucha contra la violencia doméstica.

Formación

En cuanto a la formación del personal facilitador dijo que, de preferencia, como es un trabajo comunitario, buscamos a los líderes vecinales y promotores de centros de salud, pues ellos ya tienen un grupo de personas a donde esparcir sus conocimientos y ayudar a su comunidad.

La formación de facilitadores se logra en cuatro meses, donde se fortalecen sus capacidades en Derechos Humanos, prevención de la violencia familiar y sexual entre otras temáticas.

Su rango de acción va desde la participación dentro en ferias informativas y en visitas casa por casa, donde los facilitadores nos acompañan y tocan las puertas de los vecinos, subimos los cerros y van informando sobre los servicios de la línea 100, centro de Emergencia Mujer.

“Los facilitadores les permiten conocer a la población las herramientas que tienen para salir de una situación de violencia. Al encontrar algún caso que requiera asistencia, son derivados al Centro de Emergencia Mujer, donde los psicólogos, asistentes sociales y abogados les dan la asistencia profesional que requieran”.

Pareja Facilitadora

Meléndrez estuvo acompañado de la señora Clara Escobar y el señor Priscilo Palomino, una pareja con casi 50 años de casados y son facilitadores que laboran en Villa el Salvador.

La señora Clara nos dijo “nosotros somos facilitadores de salud y vamos casa por casa y tocamos la puerta a los vecinos y conversando con ellos nos enteramos de sus problemas y les brindamos ayuda”.

Priscilo dijo que mayormente los casos de violencia se dan en casas donde viven gente de provincias donde hay mucho machismo. “También hemos encontrado varones maltratados y esos casos se tratan con mucha reserva, por un tema de vergüenza y buscamos conversar para que la pareja entienda las consecuencias negativas de la violencia.

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